Si vas a comprar un carro por primera vez, y no tienes mucho conocimiento sobre autos y, más aún, si vas a comprar un vehículo usado, puedes sentir cierta incertidumbre y desconfianza ante los comentarios que hay sobre algún carro en particular o alguna marca. Claro, ¡no quieres que te metan gato por liebre!
Es una realidad que, en el mercado de vehículos usados, incluso de nuevos, se originen ciertas creencias y “peros” que pueden hacer que te decidas por uno o por otro. A continuación, resolveremos algunos de los más comunes para que despejes tus dudas y estés más tranquilo al momento de comprar tu primer carro usado.
Falso. Lo ponemos como el primero, porque lo primero que debes tener claro es que esta afirmación no es cierta, no necesariamente un carro nuevo es la mejor opción. ¿Por qué?
Por un lado, porque, aunque los carros nuevos tienen toda la garantía del fabricante y son 0 Km, no están exentos de tener errores de fabricación que no tienen nada que ver con su uso.
Por otro, está comprobado que en el mercado puedes encontrar autos de segunda con la calidad y el respaldo como si fuera uno de primera, debido a un adecuado mantenimiento y uso responsable por parte de la compañía, concesionario o persona de confianza con quien lo adquieras.
Por ejemplo, algunos modelos de marcas tienen unas características de fabricación tan atractivas y duraderas, que tenerlos puede ser mejor que comprar un modelo nuevo básico.
Falso. Aunque es verdad que algunos vehículos, por las características de su motor, potencia o capacidad incurran en mayores gastos de combustible, los expertos en mecánica aclaran que el rendimiento de la gasolina siempre dependerá de la forma de manejar y que existen muchas variables por las cuales se puede aumentar el consumo de gasolina de un motor.
Si se quiere ahorrar se recomienda conducir con un estilo suave y continuo. Aumentar la velocidad o hacer aceleraciones y frenadas bruscas, generan más gasto del necesario. También son buenas prácticas apagar el vehículo en trancones y tanquear en las mañanas cuando la gasolina es más densa debido a que la temperatura ambiente está en un nivel bajo. En un día caluroso el combustible se expande y genera más gases y burbujas.
Cierto y Falso. “En cuanto a los colores y demás, esos mitos, aunque pueden ser ciertos no dejan de ser afirmación sin sustento. El tema de los colores es más una cuestión de gustos”, así lo explica Andrés Vásquez, gerente comercial de Usados Renting Colombia. El rojo, por ejemplo, es real que no es un carro del común, es un un color de amores y odios. O te puede gustar mucho o para nada en lo absoluto. Es un color de nicho.
En cuanto a si se choca más o no, lo que es cierto, es que el color de un carro no influye en el precio de un seguro. Para determinarlo, las aseguradoras consideran factores como modelo, versión, reportes de robo, entre otros.
Es falso que un carro blanco se mancha más. En un color negro es más difícil ocultar los rayones y cualquier mancha se va a notar más que un color claro. La preferencia en los colores se relaciona mucho con su mantenimiento, por eso tonos claros como el blanco, gris y beige son los más comerciales.
Cierto y Falso. En este sentido se pueden dar las dos opciones en cuanto a un vehículo. Lo que es cierto es que cuando un vehículo se vuelve muy popular y es del gusto de muchos, es susceptible de robo, pues también se vuelve atractivo para los delincuentes y es usual recurrir al “mercado negro”.
Falso. Es falso creer que comprar ciertos vehículos importados va a hacer muy complejo la consecución de repuestos y accesorios. Las grandes marcas de alguna manera abastecen a sus distribuidores con repuestos originales y cuanto se trata de mecánicos especializados, estos hay de sobra.
Incluso, cuando se trata de marcas que no son muy comunes, también encuentras la manera de conseguir el repuesto debido a las nuevas posibilidades del comercio electrónico.
Lo que sí es verdad, es que entre más común y comercial sea tu vehículo, más fácil encontrarás lo que requieras.
Falso. Como se comentó en un punto anterior las aseguradoras tienen en cuenta varios factores para definir el valor de un seguro como: el valor comercial del carro, las coberturas contratadas, la marca, la siniestralidad de la marca, el modelo del vehículo, el valor de los repuestos y de la mano de obra, el perfil del conductor, ciudad de circulación, cilindraje y estado mecánico, entre otros.
Cierto. Aunque todos los vehículos sufren una depreciación, cuando adquieres un vehículo usado y lo vendes, no percibirás esa gran diferencia del valor que se da cuando se vende un carro que se adquirió 0 Km.
Un carro nuevo, a los tres años tendrá una depreciación del 40%, casi la mitad de lo que se compró inicialmente.
Cierto. Cuando se trata de comprar un vehículo nuevo, las entidades financieras abren más posibilidades, tasas bajas de interés y una cobertura mayor para los créditos relacionados con esta inversión.
Aunque por supuesto se puede encontrar financiación hasta del 100% para un vehículo usado, el porcentaje de financiación cambia según el modelo del carro.
Sin embargo, también es cierto que en el mercado de los usados encontrarás muy buenos precios del carro que siempre has querido y más aún si no cuentas con el presupuesto para comprarlo nuevo.
Falso. Comprar un auto usado te da la posibilidad de acceder a una gama más alta de la que te puedes permitir si el vehículo es nuevo. Por supuesto un vehículo de gama alta sigue siéndolo aún usado, pero te puedes dar el lujo de tener un gama media alta, de un año más antiguo, con el mismo presupuesto de un vehículo gama baja nuevo.
Falso. Si crees que no vas a poder vender tu vehículo usado, es mentira. Siempre habrá alguien interesado en comprar vehículos. Cuando no se vende es porque no se ofrece por el canal y de la manera adecuada. La gente no se entera de que está en venta o no estás pidiendo el precio justo.
Recuerda que por esta razón debes hacer el mantenimiento preventivo correspondiente y cuidar los detalles estéticos.